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El policosanol es un compuesto derivado de la caña de azúcar y los brotes de cebada que se ha estudiado por sus posibles beneficios para la salud, sobre todo en lo relacionado con la reducción de los niveles de colesterol, la tensión arterial y el control del azúcar en la sangre.
Las nuevas investigaciones indican que el policosanol podría ayudar a reducir el colesterol mediante la disminución de la producción de colesterol en el hígado, el aumento de la degradación del colesterol "malo" LDL (lipoproteínas de baja densidad) y la mejora de la función del colesterol "bueno" HDL (lipoproteínas de alta densidad)[1]. En este artículo examinaremos las pruebas con más detalle y veremos qué dice la ciencia sobre este suplemento nutricional.
Se cree que unos niveles elevados de colesterol total son uno de los principales factores de riesgo de sufrir enfermedades coronarias y derrames cerebrales, lo que contribuye a la muerte prematura. Por ello, la búsqueda de formas de reducir el colesterol se considera beneficiosa para prevenir la muerte prematura a causa de enfermedades relacionadas con el colesterol. Se calcula que cada año se producen hasta 3 millones de muertes debido a los efectos del colesterol alto[2].
Los análisis de colesterol solicitados por un médico incluyen varios resultados. Entre ellos se encuentran los niveles de colesterol total, colesterol LDL y colesterol HDL. El colesterol LDL también se denomina colesterol malo, y sus niveles elevados son un factor de riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares. También tenemos el colesterol HDL, que suele considerarse "colesterol bueno". Cuanto mayor sea esta cifra, mejor. La creencia generalizada es que los niveles elevados de colesterol HDL protegen el corazón.
El posible beneficio del policosanol y el colesterol se remonta a 1994 en estudios[3] en los que se administró policosanol a conejos, y los investigadores observaron una reducción del colesterol LDL. En 2002, un investigador[4] llegó a afirmar que sus beneficios eran similares a los de los medicamentos de venta con receta lovastatina y simvastatina. También se ha comparado con la atorvastatina[5].
Aunque algunos estudios, en particular los realizados en Cuba, han demostrado los efectos positivos del policosanol sobre los niveles de colesterol, cabe señalar que los resultados de las investigaciones realizadas fuera de Cuba han sido más variados, ya que algunos estudios no han encontrado efectos significativos sobre el colesterol[6,7]. Por lo tanto, la eficacia del policosanol para reducir el colesterol podría variar según la fuente de la investigación.
Según un estudio[8] publicado en 2001, el policosanol en dosis de 20 y 40 mg/día redujo considerablemente el colesterol malo LDL (entre un 21 % y un 29 %), el colesterol total (entre un 17 % y un 21 %) y la relación colesterol LDL/colesterol HDL, al tiempo que aumentó los niveles del llamado colesterol bueno HDL entre un 8 % y un 15 %.
Además, en una investigación realizada en 2018[9] se revisaron 22 estudios y se observaron efectos beneficiosos en la reducción del colesterol, en los que participaron 1886 individuos. El policosanol no demostró ningún beneficio en la reducción de los triglicéridos.
Asimismo, un estudio realizado en 2019[10] arrojó resultados beneficiosos en la reducción del colesterol. Los autores del estudio llegaron a la conclusión de que: "...la administración de suplementos de policosanol induce una antihipercolesterolemia al inhibir la biosíntesis del colesterol, la captación de colesterol LDL y la excreción de colesterol".
Sin embargo, en un estudio realizado en 2022[11] no se observó ningún beneficio del policosanol ni en la reducción del colesterol. Sin embargo, se desconoce la dosis utilizada en los estudios.
La tensión arterial alta, también conocida como hipertensión, es una enfermedad frecuente que obliga al corazón a bombear con más fuerza de la deseada debido al aumento de la tensión y la rigidez de las arterias. Esta enfermedad, que afecta a cientos de millones de personas en todo el mundo, uno de cada cuatro adultos, no suele producir ningún síntoma, lo que deja sin diagnosticar a muchas personas con hipertensión arterial. Por este motivo, la hipertensión se ha denominado "el asesino silencioso". Se sabe que la hipertensión aumenta el riesgo de sufrir ataques al corazón, derrames cerebrales, insuficiencia cardíaca y enfermedades renales, sobre todo si no recibe tratamiento.
La tensión arterial consta de dos cifras, que normalmente se miden en milímetros de mercurio (mmHg). La primera cifra es la tensión arterial sistólica y la segunda es la tensión diastólica. La tensión arterial se expresa en 120/80 (sistólica/diastólica).
Las personas con hipertensión deben estar bajo el cuidado de su médico personal.
Además de sus posibles efectos sobre el colesterol y la tensión arterial, se ha investigado el impacto del policosanol sobre otras afecciones. Por ejemplo, podría tener efectos beneficiosos para las personas con síndrome metabólico, y las primeras investigaciones indican que podría ser útil para reducir los episodios relacionados con enfermedades cardíacas en personas con arterias obstruidas[1]. Sin embargo, es fundamental interpretar estos resultados con cautela, ya que es necesario seguir investigando para comprender plenamente la serie de beneficios para la salud relacionados con el policosanol.
Algunas investigaciones también indican que el policosanol podría ayudar a reducir la tensión arterial, con una revisión sistemática y un metaanálisis de ensayos controlados aleatorios que indican una disminución considerable tanto de la tensión arterial sistólica como de la diastólica[12].
Según un estudio[13] realizado en animales en 2018, el consumo de policosanol durante ocho semanas redujo considerablemente la tensión arterial y los niveles de aldosterona.
Además, en un ensayo doble ciego controlado con placebo realizado en 2018 con 52 mujeres también se observó una reducción considerable de la tensión arterial en las que tomaron el suplemento. En el grupo de mujeres a las que se administró policosanol se observó una reducción del 10 % y del 14 % en la tensión arterial sistólica y diastólica, respectivamente.
Por último, en un estudio[14] realizado en 2019 con adultos coreanos sanos también se observó una reducción considerable de la tensión arterial de casi un 8 %.
A escala mundial, más de 422 millones de personas sufren diabetes. La gran mayoría, entre el 90 % y el 95 %, sufre diabetes de tipo 2, una enfermedad que se debe principalmente a factores relacionados con el estilo de vida, como el consumo excesivo de azúcar, carbohidratos ricos en almidón, alimentos procesados y una actividad física limitada. La diabetes de tipo 1 no se puede prevenir y se produce cuando el sistema inmunológico ataca al páncreas, impidiéndole la capacidad de segregar insulina.
Unos niveles de azúcar en la sangre elevados de forma crónica pueden causar daños en el cerebro, los nervios, los tejidos, los ojos, el corazón y los riñones. Cuando el azúcar en la sangre no se controla bien, las paredes de las arterias se dañan (disfunción endotelial), lo que provoca obstrucción arterial, derrames cerebrales o ataques al corazón. Unos niveles elevados de colesterol podrían empeorar esta situación. La diabetes también aumenta el riesgo de sufrir varios tipos de cáncer y la enfermedad de Alzheimer, y se cree que unos niveles elevados de insulina son una de las principales causas de que esto suceda. El ayuno y el consumo de una dieta baja en carbohidratos, o dieta cetogénica, podrían resultar beneficiosos.
El policosanol podría influir en los niveles de azúcar en la sangre. Las investigaciones[15] indican que podría reducir los niveles de azúcar en la sangre después de una comida, lo cual es una necesidad constante de las personas diabéticas.
Además, según un estudio, el policosanol provocó un aumento del 5 % en la secreción de insulina en los niveles basales de glucosa y del 14 % en los niveles altos de glucosa en la sangre[16]. Por lo tanto, las personas diabéticas o las que toman medicamentos para controlar el azúcar en la sangre deben vigilar de cerca sus niveles de azúcar en la sangre durante el uso de policosanol y consultar a un profesional de la salud para determinar si es necesario realizar algún ajuste en sus medicamentos para la diabetes[17].
El hígado graso afecta a 1 de cada 3 personas en la mayoría de los países desarrollados del mundo. El exceso de azúcar, los alimentos procesados y el consumo de alcohol son las principales causas. Quienes consumen una dieta rica en alimentos procesados, entre los que se incluyen los carbohidratos refinados, también tienen un mayor riesgo de padecer hígado graso. El hígado graso es un factor de riesgo de cirrosis hepática y cáncer de hígado[18]. En mi consultorio privado, he atendido a varios pacientes que desarrollaron una enfermedad hepática terminal por el simple hecho de alimentarse mal.
Como sabemos que el policosanol tiene efectos favorables sobre los parámetros metabólicos de una persona, tal y como se ha comentado anteriormente, se deduciría que también tiene efectos beneficiosos sobre el hígado graso. Sin embargo, la mayoría de los estudios realizados al respecto se basan principalmente en estudios en animales. Según este estudio[19] realizado en 2022, el policosanol produjo un efecto beneficioso en un hígado fibrótico utilizando un modelo en ratas. Esto concuerda con un estudio similar[20] realizado en 2003 en Cuba.
Por último, según un estudio[21] realizado en 2016, parece que el policosanol también ayuda a revertir el hígado graso.
Sin embargo, los datos sobre el policosanol y la prevención o reversión del hígado graso son escasos, por lo que es necesario realizar más estudios antes de presentar pruebas más concluyentes.
Actualmente existen estudios de investigación en animales[22,23] sobre los beneficios del policosanol para el tratamiento de la pérdida de memoria o la enfermedad de Alzheimer. Los resultados preliminares son alentadores, pero es necesario realizar más investigaciones en poblaciones humanas. Además, el policosanol también podría ser beneficioso para las personas con disfunción mitocondrial, según un estudio[24] realizado en 2022.
En resumen, en algunos estudios se han observado resultados prometedores en cuanto a los posibles beneficios del policosanol para la salud de las personas con síndrome metabólico, sobre todo en relación con el colesterol, la tensión arterial y el azúcar en la sangre. Es importante que las personas que estén considerando el uso de policosanol consulten a un profesional de la salud y tomen decisiones fundamentadas basadas en las pruebas disponibles.
Referencias:
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